3 de junio – Ni Una Menos
El 3 de junio de 2015, en ochenta ciudades del país, se convocó a una protesta para repudiar el femicidio de la joven rosarina Chiara Páez, de 14 años.
En la Plaza del Congreso leyeron un documento que ponía en palabras las violencias históricas sufridas por las mujeres y exigía al Estado la planificación de políticas públicas de prevención, asistencia y erradicación de la violencia contra las mujeres, garantizar el acceso de las víctimas a la justicia, la elaboración de un Registro Único de Casos de Violencia contra las Mujeres (RUCVM), garantizar la Educación Sexual Integral (ESI) en todos los niveles educativos y la protección de las víctimas de violencia con monitoreo electrónico de los victimarios.
En un nuevo aniversario de aquella manifestación histórica, la conciencia social sobre las problemáticas de género se acrecentó y numerosas políticas de Estado acompañan hoy a las víctimas y trabajan en la prevención de los delitos.
En Argentina, el marco legal es muy amplio, aun así las estadísticas de violencia de género son altas. Según La Casa del Encuentro: “Hay una víctima de violencia de género cada 25 horas.”
Desde el 1° de enero al 30 de abril de 2022, se produjeron 110 femicidios, 3 trans/travesticidios y 6 femicidios vinculados de varones, según el informe del Observatorio de Femicidios en Argentina “Adriana Marisel Zambrano” que dirige La Casa del Encuentro. Por lo tanto, 123 hijas/hijos quedaron sin madre, el 65% son menores de edad; el 58% % de los agresores eran parejas o exparejas. El lugar más inseguro para una mujer en situación de violencia continúa siendo su vivienda o la vivienda compartida con el agresor (65 % fueron asesinadas en su hogar). Y en términos absolutos, Buenos Aires sigue siendo la provincia con más casos, seguida por Santa Fe, Córdoba, y Santiago del Estero.
Sin embargo, las violencias no han cesado y como sociedad debemos seguir trabajando para erradicar el flagelo de la violencia hacia las mujeres e identidades no binarias, por una sociedad donde reine la paz social, más justa e igualitaria.
Desde el SGBATOS nos encontramos firmemente comprometidos con la obtención de la paz laboral y la integración de las y los trabajadores en todos los ámbitos.
